Me decidí

Había estado todos estos días, toda esta semana o no sé si todo este mes con un vacío inmenso. Me había alejado de vos, y lo poco que hablaba era solo por costumbre. En las mañanas ya no te saludaba. Cuando me regalabas algo para comer, no te daba las gracias. Cuando iba a tu casa, solo escuchaba tus palabras, las entendía, pero no hablaba yo con vos. Esto me dejo totalmente vacía por dentro.
Viernes, había llegado la noche y fuimos a tu casa con mis hermanitos como siempre. En ese viaje había discutido con mi hermana, va no discutido, sino que me di cuenta de cosas en ella que me hicieron chocar con una pared. No sabía que hacer, porque mi hermanita no tenía la culpa..
Llegamos. Mi hermano se había ido a otra pieza a jugar con unos amiguitos. Yo y mi hermana nos quedamos en el living, donde había música. -Vos estabas ahí, pero no te miraba ni te hablaba, y mi hermana tampoco- Había mucha gente en ese lugar, las cuales yo conocía y todas me saludaban, pero mi hermana no. Estaba sola sentada escuchando la música. Ella siempre fue así, solitaria y era algo que quería cambiar y no sabía como; Las veces que salia yo con ella y otras amigas, ella se apartaba y se ponía a cantar en voz baja y sola. Yo me asustaba y la retaba para que haga "sociales", no quería que su vida siguiera así, yo quería lo mejor para ella, y quiero lo mejor para ella.
Observé mi alrededor y no te quería ver, Pero dejé de ignorarte. Decidí hablar con vos y escuchar lo que querías decirme. Primero cerré mis ojos, comencé a cantar a la par de la música que estaba sonando y sentí tu amor. Duró un segundo, pero al abrir los ojos....

Había grupitos de chicas, todas hablando y riendo, y mi hermanita estaba sola mirando el piso. Me puse triste. Me levanté me senté alado de ella, tomé su mano y le sonreí. Volví a cerrar mis ojos y a retomar la canción que me hacía volar. Ella también cantaba, pero muy bajito. Una vez más sentí tu amor, sentía que me abrazabas, y esta vez empecé a hablarte. Decidí no abrir mis ojos. Derrepente sentí mis mejillas mojadas, estaba llorando. No sé porqué. Te pedí perdón por este tiempo de ausencia, de ignorancia. Vos me habías dado tanto y yo te devolvía mi silencio. Me arrepentí y te lo confesé. Seguí llorando.
Había buscado un momento de reflexion durante estos días, o semanas o no sé si este mes; pero no lo encontraba. Los minutos que encontraba en silencio siempre eran interrumpidos por algún mensaje urgente o alguien viniendo a decirme algo. Pero ahí estaba yo. Tomada de la mano de mi hermana, llorando y tratando de cantar a la vez, mientras de apoco te hablaba.
La canción se terminó, pero estaba bien. Sabía que no me iba a ir como había venido. Esta vez me sentía, me sentía.. ¿cuál es la palabra? Me sentía llena. Ese vacío inmenso desapareció.
Abrí mis ojos y para mi sorpresa mi hermana también estaba llorando. Yo no podía creerlo. Tal vez ella también había decidido hablar con él. No dude y la abracé, y ella un tanto fría me abrazó con una mano, aunque ya sabía que era así.
Fue un momento tan raro como lindo.